¿Qué opciones hay para acceder a la universidad después de los 25 años?

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Hombre sentado en una biblioteca

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Muchas personas piensan que la universidad es solo para los jóvenes que acaban de terminar el bachillerato, pero lo cierto es que hay otras vías de acceso para quienes tienen más de 25 años y quieren seguir formándose. Ya sea por motivos laborales, personales o simplemente por curiosidad, nunca es tarde para estudiar una carrera universitaria y ampliar tus conocimientos y competencias.

Requisitos generales para acceder a la universidad

En primer lugar, debes saber que existen diferentes requisitos generales para acceder a la universidad, dependiendo de tu situación académica previa. Algunas de las opciones más habituales son las siguientes:

  • Haber superado la Prueba de Acceso Universitario (PAU), también conocida como EBAU o EvAU, que se realiza al finalizar el bachillerato.
  • Estar en posesión de una titulación universitaria oficial, ya sea de grado, máster o doctorado, que te permita acceder a otros estudios de tu interés.
  • Estar en posesión de una titulación superior de Formación Profesional (FP), que te habilite para cursar una carrera relacionada con tu familia profesional.
  • Haber realizado estudios de otra índole, pero con una homologación reconocida por la universidad, como por ejemplo, estudios extranjeros equivalentes al bachillerato español.
  • Haber superado el curso Preuniversitario o las Pruebas de Madurez pertinentes, que se ofrecen en algunas universidades para facilitar el acceso a sus estudios.

Si cumples alguno de estos requisitos, podrás solicitar tu admisión en la universidad que elijas, siempre que ofrezca los estudios que deseas cursar y que tengas la nota de corte suficiente para acceder a ellos. En caso contrario, tendrás que optar por otra vía de acceso específica para mayores de 25 años, que te explicamos a continuación.

Prueba de acceso a la universidad para mayores de 25 años

Si tienes más de 25 años y no cumples ninguno de los requisitos generales para acceder a la universidad, no te preocupes, porque aún tienes una oportunidad de cumplir tu sueño. Se trata de la prueba de acceso a la universidad para mayores de 25 años, una prueba similar a la selectividad, pero adaptada a las características y necesidades de este colectivo.

Para poder realizar esta prueba, debes cumplir el siguiente requisito:

  • Tener 25 años o cumplirlos antes del 1 de octubre del año de celebración de la prueba.

Cada universidad abre anualmente un solo plazo de inscripción para esta prueba, que suele ser entre los meses de febrero y marzo. Además, cada universidad establece sus propias fechas de convocatoria, modelos de examen, documentación y contenido de la prueba, por lo que debes informarte bien en la universidad en la que quieras examinarte. Puedes realizar la prueba de acceso para mayores de 25 años en la universidad de tu elección, siempre que en ella se impartan los estudios que quieras cursar. Además, tendrás prioridad en la admisión si te matriculas en la universidad en la que has realizado la prueba.

La prueba de acceso consta de dos partes:

  • Fase general, cuya finalidad es apreciar la madurez e idoneidad de los candidatos para seguir con éxito estudios universitarios, así como la capacidad de razonamiento y de expresión escrita. Comprende tres ejercicios referidos a los siguientes ámbitos:
    • Comentario de texto o desarrollo de un tema general de actualidad.
    • Lengua castellana.
    • Lengua extranjera (francés, inglés, alemán, italiano o portugués).
  • Fase específica, que tiene por finalidad valorar las habilidades, capacidades y aptitudes de los candidatos para seguir y superar los estudios de la opción que han elegido. Se estructura en cinco opciones:
    • Opción A: Artes y Humanidades.
    • Opción B: Ciencias.
    • Opción C: Ciencias de la Salud.
    • Opción D: Ciencias Sociales y Jurídicas.
    • Opción E: Ingeniería y Arquitectura.

En esta fase, debes elegir una de las opciones y realizar dos ejercicios sobre dos materias de dicha opción. Por ejemplo, si eliges la opción B, podrías examinarte de matemáticas y física, o de química y biología, entre otras combinaciones posibles. La elección de la opción y las materias debe estar relacionada con los estudios universitarios que quieras cursar, ya que cada carrera tiene unas materias preferentes que se valoran más a la hora de calcular la nota de admisión.

Cómo preparar la prueba de acceso a la universidad para mayores de 25 años

Si te decides a realizar la prueba de acceso a la universidad para mayores de 25 años, debes prepararte bien para superarla con éxito. Para ello, tienes varias opciones:

  • Por tu cuenta: Puedes consultar los modelos de exámenes de tu comunidad autónoma de convocatorias pasadas y estudiar los contenidos por tu cuenta, siguiendo el temario oficial de cada materia.
  • Haciendo un curso: Muchas universidades ofertan este curso preparatorio, que suele durar un año académico y que te proporciona los conocimientos y las habilidades necesarias para afrontar la prueba. Además, al hacer el curso, tienes la ventaja de que no tienes que pagar las tasas de examen y que tienes preferencia en la admisión en la universidad que lo imparte. También puedes optar por cursos online o a distancia, que te ofrecen mayor flexibilidad y comodidad.
  • Preparar la selectividad online: Otra opción que tienes es preparar la selectividad online, que es la prueba de acceso universitario para los estudiantes de bachillerato. Esta opción te puede servir si quieres acceder a una carrera muy demandada y necesitas una nota de corte muy alta, ya que la selectividad online te permite mejorar tu nota de admisión con las materias de la fase específica. Además, al preparar la selectividad online, tienes la ventaja de que puedes estudiar a tu ritmo, desde cualquier lugar y con el apoyo de profesores expertos y materiales de calidad.

Como has visto, acceder a la universidad después de los 25 años es posible y tienes varias opciones para hacerlo. Solo tienes que elegir la que mejor se adapte a tu situación y a tus objetivos, y prepararte con esfuerzo y motivación. Recuerda que la universidad no entiende de edad, solo de tus ganas de aprender y evolucionar. Así que, si tienes más de 25 años y quieres estudiar una carrera universitaria, no lo dudes más y lánzate a la aventura.